Una reciente encuesta de PEFC Internacional, realizada en 13 países del mundo (Alemania, Australia, Austria, Brasil, China, España, EE.UU., Finlandia, Francia, Italia, Japón, Reino Unido y Suecia), destaca que más del 80% de los consumidores consideran que las empresas que utilizan material certificado de bosques gestionados de forma sostenible deberían utilizar etiquetas de certificación. También destaca que las etiquetas de certificación son los medios que más confianza aportan a los consumidores sobre el origen sostenible de los productos forestales.
Como podemos leer detenidamente en nuestra sección de Certificación Forestal hay dos certificados que son los más reconocidos en todo el mundo, estos son FSC® (Forest Stewardship Council) y PEFC (Programme for the Endorsement of Forest Certification). Estos certificados indican que el producto que tiene dicho sello proviene de bosques gestionados sosteniblemente en base a valores sociales y ambientales.
El sector de las artes gráficas, que manipula papel de origen forestal, es en el que más llamativo resulta la utilización de estos estándares, ya que es, el producto final que llega a nuestras manos. Si os fijáis en envases de cartón, bolsas de papel, sobres comerciales, etiquetas de ropa, tetrabriks… os daréis cuenta que muchos de ellos, cada vez más, tienen estos sellos, que no indican otra cosa que la procedencia de la materia prima con la que se ha realizado este papel o cartón provienen de un bosque gestionado de forma sostenible.
Para que el producto final pueda tener este sello, toda actividad que interviene en el proceso, desde el bosque hasta el consumidor final, tiene que ser capaz de demostrar, la procedencia de producto certificado, esto es desde el bosque, pasando por todas las industrias transformadoras (aprovechamiento forestal, fabricación de papel, manipulado, impresión, transporte…) hasta el consumidor. Esto es lo que se conoce como Cadena de Custodia que nos garantiza que el papel que tiene ese sello proviene de un bosque que también está certificado. Esta cadena tiene que estar certificada en todos sus eslabones para que no se pierda esa trazabilidad de un producto bien gestionado.
Hoy día numerosas empresas utilizan papel certificado (en sus diferentes formatos), esto indica que la empresa es responsable medioambientalmente puesto utiliza un producto que también lo es. Por ello os recomendamos que cuando vayáis a comprar sobres, folios, post-it o cualquier producto, cuya materia prima sea de origen forestal, solicitéis al vendedor el producto con uno de estos dos certificados, en nuestras manos está que cada vez haya más bosques gestionados sosteniblemente, que se eliminen las cortas ilegales y que “los pulmones de la tierra” estén cuidados y aprovechados de forma responsable.